Reg Sanitario C-36-003024
Tratamiento de bruxismo con toxina botulínica
El tratamiento de bruxismo con toxina botulínica es una solución eficaz para quienes padecen rechinamiento o apretamiento involuntario de dientes, que causa dolor mandibular, desgaste dental, cefaleas y tensión facial. En Clínica DeCastro aplicamos protocolos médicos avalados, para reducir los síntomas, preservar la salud dental y musculoesquelética, y mejorar tu calidad de vida.
Se administra toxina botulínica tipo A (BTX-A) en los músculos responsables del bruxismo (masetero, temporal, etc.) para disminuir la actividad muscular excesiva. Esto permite que los músculos se relajen, reduciendo la presión que causan los dientes al apretar o rechinar.
¿Cómo se realiza?
- Primera valoración médica: análisis del historial, tipo de bruxismo (nocturno, diurno), grado, causas posibles (estrés, alteraciones del sueño, psiquiátricas, dentales).
- Elección de músculos a tratar (usualmente masetero, ocasionalmente temporales) según la clínica de cada paciente.
- Inyección de dosis ajustadas de toxina, bajo condiciones estériles.
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Sesión breve; molestias mínimas; uso de anestésico local contemplable si es necesario.

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Resultados y Duración
- Efectos iniciales suelen apreciarse entre 1-4 semanas tras la inyección.
- Pico de efecto alrededor de 5-8 semanas.
- Duración habitualmente de 3 a 6 meses antes de que sea necesario repetir el tratamiento. -
Beneficios
- Disminuir la frecuencia de los episodios de bruxismo, tanto de día como de noche.
- Reducir la fuerza de cierre dental y la intensidad del dolor mandibular.
- Mejorar la calidad de vida y disminuir molestias como dolor de cabeza y tensión muscular.